viernes, 27 de enero de 2012

NO MOLESTAR, GUINEA ESTÁ SOÑANDO



Cuando me enteré de que Henri Michel abandonaba el cargo de seleccionador de Guinea Ecuatorial, inmediatamente supe que un tren se me escapaba. Había vuelto a defender su escudo después de algunos años y, con el poco margen de tiempo que quedaba, me sentía muy seguro de acudir a la Copa de África si el francés continuaba en el banquillo. Sin embargo, paradójicamente, lo que fue una buena noticia para el equipo supuso un revés para mí. Salió una nueva lista de convocados y, como ya me temía, mi nombre no aparecía por ningún lado. Tuve la tentación de quejarme y patalear, pero entonces lo entendí. La vida no puede dártelo todo. A veces, las situaciones en las que más esfuerzo e ilusión le pones se van al traste para mantenerte con los pies en el suelo y recordarte que, a menudo, el 100% no es suficiente.

Pasadas unas horas de lógica pesadumbre, releí la lista. Y en ella estaban muchos de mis  amigos,  hermanos ya. Mi visión de la situación giró 180º para transformarse en alegría y expectación sobre qué era capaz de hacer el equipo. Guinea Ecuatorial se presentó en la competición con el coeficiente FIFA más bajo (nº150) de cuantas selecciones disputan el torneo. Lybia, Zambia y Senegal eran los enemigos a batir, los gigantes a los que esta pequeña República al oeste de África debía plantar cara.

Los libios amenazaban con aguar la fiesta del pueblo guineano en el partido inaugural. Por poco lo logran, ya que el partido se presentó tosco. Lo intentaron Juvenal, Randy y Fidjeu sin suerte. Para resolver el entuerto entró Bodipo, entre el rugido  orgulloso de la afición local, pero recayó de su lesión enseguida. Los minutos, inmisericordes, desfilaban a velocidad de vértigo por el marcador. Todo apuntaba la empate hasta que Balboa, imperial, mandó el balón al fondo de las mallas para delirio de la grada y de todos los guineanos en España. Media faena estaba hecha.

La segunda piedra parecía una montaña. Senegal, uno de los países con los delanteros más demoledores de todo el planeta. Una lluvia torrencial amenazó con suspender el partido, pero en África hace falta mucho más para anular una cita así. Los senegaleses aplastaron a los guineanos durante la primera parte. Issiar Dia paseaba por el carril derecho a su antojo y se hartó de servir balones que N'Doye, Ba y Cissé malbarataron incomprensiblemente. El descanso supuso un bálsamo para Nzalang, que se adueñó del balón en la reanudación. Empezó a circularlo de izquierda a derecha y de derecha izquierda con la precisión de un reloj suizo. En una de éstas, Juvenal vio un desmarque vertical a su derecha y lanzó un pase a la espalda de la defensa. Kily controló, avanzó y puso un centro de terciopelo para que Randy ajusticiara la prepotencia senegalesa. Parecía un milagro pero no, fue una simplemente una lógica consecuencia del juego.
Entonces Senegal se dio cuenta: estaban fuera de la Copa África. Lo intentó de todas las maneras posibles, pero Danilo, Rui y Doé no se doblegaban. Hasta que Sow, de rebote, hizo el 1a1 en posición ilegal. Quedaban 5 minutos y el asedio visitante se tornaba cada vez más feroz. Pero era el día de Kily, un trotamundos del fútbol español que milita en la 3a división actualmente. Primero alardeó de potencia en un robo, conducción y pase que Balboa no pudo materializar. Y cuando el partido agonizaba, recibió a 30metros de la portería y disparó, con el empuje de todo el pueblo guineano, un misil teledirigido que se coló por la escuadra. 2a1. Guinea Ecuatorial clasificada para los 1/4 de final.

Ni en los sueños más optimistas podíamos imaginar algo así. Me sentí orgulloso de ver cómo esos chicos defendían el escudo como si les fuera la vida en ello. Sabemos que los Derechos Humanos en Guinea no brillan por su excelencia. No es nada nuevo, hubo y habrá tiempo para analizarlo. Pero no ahora, porque es momento de fútbol. No de política. Os invito a que nos acompañéis en esta aventura. Hay un pueblo que está soñando, se ruega NO MOLESTAR.

2 comentarios:

  1. Muy buena crónica Alberto!! Enhorabuena y arriba NZALANG!

    Alex kabia

    ResponderEliminar
  2. Gracias Alex! Hay que apoyar a estos chicos desde la distancia :)

    ResponderEliminar